La realidad es que estas áreas están compuestas por pequeños mineros con intereses e inversiones muy diferentes entre si, con organizaciones disimiles y sobre todo con pugnas internas que redundan en el incumplimiento de las obligaciones pactadas para mantener viva la ARE.
si sumamos a esto, los nuevos requerimientos de ley, tal como el Decreto 1886 y el Decreto 1072; SGSST, la perspectiva de cumplimiento legal esta lejana.
Es aquí donde el SENA podría desarrollar una importante gestión en todas las direcciones: capacitando a los mineros en salud ocupacional, en minería, en trabajo asociativo; haciendo un acompañamiento continuo hasta lograr efectivamente que el ARE llegue a su consolidación.
incluso, quienes opten por cambiar de actividad económica, podrían ser capacitados en proyectos productivos diversos.
He aquí una gran oportunidad, una sinergia que beneficiaria a todos.
